viernes, 14 de diciembre de 2012

UN AMOR POR SORPRESA,CAPÍTULO4.



Al pronto me voy de casa de Gala al darme cuenta de que es casi de noche, Gala se ofrece a llevarme pero simplemente le beso la mejilla y salgo.
Ando fijándome en detalles sin importancia. De repente oigo unos pasos que siguen los míos, ando más deprisa, y los otros pasos aumentan de velocidad. Me giro atemorizada y me encuentro al imbécil mal educado de antes.
-¿Qué coño haces siguiéndome?
-Quería asegurarme de que llegabas bien a tu casa.
-Pero que mierda… ¿llegar bien a casa? ¿Pero tú estás loco o qué?
-¿Loco? ¡Te estoy protegiendo!
-Enserio, estoy flipando. Primero me insultas sin conocerme de nada y ahora me sigues con la excusa de ¿protegerme? Si vas  a violarme hazlo ya, que tengo prisa.- le digo irónica.
-Solo te vi salir del portal de mi casa y me preocupe porque es de noche, eres guapa, hay mucho salido suelto por ahí.
-Creo que uno de esos salidos eres tú.
-Solo quiero ayudarte.
-¿Por qué?
-Porque mi hermana, Gala, me lo ha pedido.-pasan unos incómodos segundos en silencio.
-Pues perdón entonces, y gracias.
-De nada. Y ahora, ¿te puedo acompañar ya a casa?
-Por supuesto.-caminamos en un incómodo silencio. De reojo observo su cara. Es de rasgos duros y perfilados, sus ojos azules muestran una actitud seria. Su pelo peinado en un grande tupé negro le da un aspecto increíblemente atractivo. Las hormonas se revolucionan y noto el calor subiendo por mi cuerpo.
-¿Por qué me miras fijamente?-pregunta un tanto distraído.
-Na...nada.-tartamudeo con los mofletes de un escarlata intenso.
-Creo que no me he presentado. Soy Leo.
-Helena. Hel para los amigos.- se para me da dos besos y reímos a carcajada limpia.
-Eres muy maja para ser amiga de mi hermana.
-¿Sabes qué luego se lo voy a contar?
-Me da igual.
-¿De qué vas, eh chulo?
-De nada.
-Sí, sí. –y sin que me lo espere me agarra como un saco de patatas y empieza a correr por la calle. Yo, flipando por la confianza que se está tomando conmigo empiezo a gritar divertida.
-¡¡LEO!! Bájame por favor.-intento poner voz dulce y de niña pequeña que sorprendentemente funciona.
-Quejica.
-Al menos no soy una pervertida, ts.
-¿Me estás llamando pervertido?
-Tal vez.-sonrío maliciosamente y me paro delante de mi casa.
-¿Ya hemos llegado?-pregunta sorprendido.
-Se ha hecho corto. ¿Eh?
-Pues sí.-lo dice bastante serio mientras se acerca, pone una mano en mi cintura y besa mis mejillas.
-Adiós, Leo.
-Adiós Helena, Hel para los amigos.- con unas últimas carcajadas entro en casa un poco más feliz.
Con muchísimos nervios me preparo el conjunto de mañana para la “cita” con Niall.
Escojo un vestido de palabra de honor, dorado con brillantes negros que me llega por las rodillas acompañadas de unos tacones negros.
Ilusionada me meto en la cama y sueño con el dulce muchacho de cabellos rubios y preciosos ojos azules…

2 comentarios:

  1. Queee chulaa! Me he empezado la historia y está muy bien :D Espero pronto el siguientee!

    ResponderEliminar